Convierte tu boda en un sueño llegando a la Iglesia en un maravilloso y elegante Rolls Royce. Y es que, pasearse en un rolls es una experiencia única. Si además lo acompañamos de unas preciosas flores de invernadero, de las notas de un emocionante Ave María cantada y de una botella del mejor champagne... se convierte en un sueño.
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viernes, 6 de marzo de 2009
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